Supe que me querías como no saberlo,
Cuando te espie abrazando
Mi vestido blanco almidonado
Que vibraba colgado sobre la colina.
Mi dicha agudizaba
El azul celeste, el azul marino.
No te lo dije por pudor aquel dia
Que por el cura en la capilla entre
Serafines burlones y flores resecas
Quedo despojada mi inocencia.
Desde la vereda al puerto
Divise las velas blancas que te llevaba
Salpicando espuma como finas lagrimas.
Ya toda una vida ha pasado, amigo
Desde que te rendi a las Americas
Pero aun me sigo preguntando
Que hubiese sido si no fuese tan orgullosa
Me lo pregunto y me lo respondo
Mas vale asi, que me recuerdes moza.
Antonia Baranov
No comments:
Post a Comment